Vuelta a la carga

Después de una semanita sin poner nada (no tengo perdón) vamos a contar algo por aquí, que van siendo horas... (y dejando a un lado mi derrota por goleada en Hattrick contra el líder :P, esta semana no hay resumen del partido, eah xDDD). Vamos con las consolitas n_n
En Japón se ha hecho una encuesta para saber qué consola es la más esperada, y parece que la que más desean que salga ya al mercado es la PS3 y por bastante diferencia, aunque, tras preguntar cuánto estarían dispuestos a pagar, las respuestas no superaban los 200 y poco euros (y teniendo en cuenta que cuesta 500€ fabricar una, y por ahora tienen pensado sacarla lo más seguro a 400€... :P). Yo, siendo sincero, creo que será la mejor y con más juegos, pero hay juegos muy buenos en Nintendo, a pesar de que la gente se piense que es una consola para niños -_-
Y como estamos con Nintendo, ¿puede la GBA acercarse al concepto novedoso que supone la DS? Pues ya lo ha demostrado con el "Yoshi's Universal Gravitation" (en el que inclinando la consola interactuábamos con el juego) o con otro juego (del que ahora no recuerdo el nombre, que había salido hace poco la segunda parte) que utilizaba la luz solar para recargar la energía del arma del protagonista. Pues con un nuevo juego, el "Wario Ware: Twisted!", se volverá a utilizar la inclinación de la consola para controlar el juego (acercar una vela a otra, inclinar un espejo que refleje la luz para acabar con un vampiro...)

Y para acabar, voy a hablar de una saga que me está gustando bastante, "Fire Emblem", de la que ya llevan 8 partes en Japón. Me centraré a partir del primer "Fire Emblem" de GBA. La mecánica general de todos es la siguiente: eres un táctico, y diriges un grupo de héroes en el campo de batalla, dándoles órdenes (sólo aparecen ellos en el mapa, tú no). Los personajes suben niveles ganando experiencia por los combates o uso de sus habilidades, y pueden mejorar su clase de personaje si alcanzan un determinado nivel y utilizan el objeto adecuado. En los combates es donde reside la mayor carga del juego (siendo un RPG táctico, estaba claro, ¿no? :P). El terreno juega un papel importante, pero sobre todo, lo más importante es el triángulo de armas (parecido a piedra, papel, tijera, un arma es mejor que otra, pero hay otra que es mejor que ésta, con lo que hay que ver qué arma usa el enemigo y atacarle con alguien que use un tipo de arma que venza a la suya, para tener ventaja), que se usa también en cuanto a los tipos de magia, cuál es más poderoso frente a otro. En ocasiones, hasta se puede hablar con el enemigo usando el personaje adecuado, y podrá unirse a nuestras filas, ganando un valioso aliado. Otro de los aspectos a destacar es la historia de la saga, entretenida y que va evolucionando según avanzamos en el juego, llegando a cambiar completamente. Las conversaciones entre personajes consiguen meterte aún más en el juego gracias al gran carisma que derrocha cada uno, con sus particularidades individuales respecto a su personalidad, y las relaciones que tienen con los demás componentes del grupo. La historia se centrará en intentar detener a un brujo que intenta hacer volver a los dragones, ya desaparecidos hace tiempo en una guerra con los humanos, en la que venció la humanidad.


En su segunda parte, "Fire Emblem: Sacred Stones", se introducen varias novedades: ya no se combatirá sólo contra otros humanos, sino que también habrá criaturas dispuestas a acabar con nuestra aventura, desaparecerá algo de linealidad, ya que podremos volver a ciudades visitadas, pudiendo encontrarnos las consecuentes emboscadas de camino, y en el avance de clases podremos escoger a cuál mejorar, no sólo será una única opción. La historia de esta parte gira en torno a las piedras sagradas, y la traición del príncipe de Grado, amigo de infancia de los dos hermanos protagonistas (herederos del Reino de Renais, aliado del Reino de Grado).
La primera entrega está en español, y la segunda saldrá en noviembre, junto a la de Game Cube, "Path of Radiance", que seguirá la misma línea de la saga, pero con mejores gráficos, claro.